Chicos estoy de vuelta. Ha llegado la hora de contarles mis nuevas aventuras. Después de haber pasado mucho tiempo en India, decidí dejarla atrás, porque me hacía mucha falta la vieja Europa. Así es como llegue a Escocía. Siempre me fascinó la hermosura de este país y ahora me encuentro aquí para poder experimentar todo lo posible. Después de una larga y cansada excursión, llegué a Foyers, que está en la orilla de Loch Ness, partiendo desde Fort William. Durante el camino hice buenos amigos con unos holandeses, con quienes disfrutamos de los espectaculares paisajes desde Suidhe Viewpoint. Antes de que anocheciera llegamos a foyers y buscamos el alojamiento Craighdarro para podernos registrar. No era un hotel lujoso de cinco estrellas, pero a quien le interesa si se trata de disfrutar de programas con gente maravillosa. Ya que nos estábamos muriendo de hambre, comimos furiosamente las especialidades de casa. De primero comí partan bree, el cual es una sopa tradicional escocesa hecha con mariscos y arroz. De segundo ordene collops, del que dicen que su origen es de la época de los vikingos y básicamente es de carne molida con pimiento y puré de patatas. Para poder saborear una bebida tradicional entonces pedí Drambuie, que es un tipo de licor, pero sumamente dulce. Al final esta bebida se la dí a uno de los holandeses. Por lo general cuando uno va de excursión en grupo, se suele compartir la comida y bebida traídas con todos. Como tenía un litro de pálinka de ciruela conmigo, les ofrecí a todos los holandeses, pero ninguno pudo tomárselo de un trago. Después de esto ellos también me ofrecieron los postres que habían traído. Me dijeron que un pedazo sería suficiente, pero como me gustaron tanto en total me comí siete. Como me rechazaron el pálinka, entonces de este también bebí mucho. Y luego sucedió. Vi el monstruo de Loch Ness. Todo es muy confuso, pero me recuerdo, que quería tomar un poco de aire fresco, y por esto fui a ls orilla del lago, y de repente escuché un sonido terrorífico que venía del lago y ahí se encontraba. La leyenda de casi 1500 años emergiéndose del agua y viéndome directamente a los ojos. Fue una experiencia inolvidable. Por suerte tuve la oportunidad de hacerme una selfie ya que sin esto no me creyeran.